Hacia rutas gastronómicas…

Uno de los factores más importantes para realizar un trabajo profesional es conocer el sector en el que desarrollas la labor.

Hace ya poco más de dos años en los que mis caminos comerciales me conectaron con el sector de la hostelería y la gastronomía, con diversas campañas comerciales en paralelo y trabajando comunicación y contenidos para la venta. Surgieron oportunidades de entrar en un sector que siempre había visto como cliente, y que gustándome bastante, no había sido una de las opciones preferentes nunca a la hora de plantear un «desembarco» profesional en nuevos retos.

Pero surgió, y tras un timorato inicio, y cursando a la vez un Máster en Negocios Digitales e Internacionalización, la idea toma peso y comienza un desarrollo de marca hacia Gastrocomercial como cambio de rumbo profesional hacia las ventas, el marketing y la comunicación en el sector gastronómico (un sector necesitado de comunicación muy enfocada y concreta, eso sí, algo saturado de empresas, profesionales, influencers y otras figuras menores en comunicación, y con una necesidad imperativa de especialización para ser efectivo y rentable) siendo mi piedra angular la venta como agente comercial independiente, sin olvidar la mencionada comunicación. La corta vida de Gastrocomercial, marca nunca muerta pero sí invernando profunda y prolongadamente, atiende a la necesidad que enlaza con la frase inicial de este post, el conocimiento del sector. Un lanzamiento a las ventas con la obligación atender de la mejor forma al mundo de la hostelería, y en mi caso personal enfocado en la mayoría de las veces hacia la «alta» gastronomía. Con un lenguaje y un producto que se aprende (como todo se puede aprender más o menos rápido) pero que requiere una adaptación importante para poder tener un mínimo éxito a la hora de tratar con un nuevo perfil para mí, Chef Ejecutivos, F&B´s y Directores de Hoteles y de Compras con un lenguaje que bien podía ser a veces otro idioma para mí. Un contexto dónde aprender sus necesidades, y en muchos casos, entender como funciona una cocina profesional es tanto y más importante que el producto en sí. Siempre he tratado de vender mejoras o soluciones, y no podía hacerlo hasta comprender que mejoras puedo sugerir o que problemas puedo solucionar…

Y un proyecto te seduce… 

Que todo esto junto, y llamémosle prudencia por no desenvolverme aún de forma muy fluida en dicho ecosistema, haya roto la idea de posicionar Gastrocomercial como marca hace ya docena y media de meses solo ha tenido connotaciones positivas. Definir una sola representación hasta conocer el proyecto (y un poco mejor el sector) ha devenido en una inmersión total en Da Silva Gastronomía, pudiendo, ahora sí con mayor firmeza, desarrollarme en la venta mejor enfocado y poder actuar en otros campos como la comunicación y la estrategia de marca. Desde una perspectiva personal, si bien no hace falta mirar mucho para entrever la bisoñez que aún poseo en el sector, esta oportunidad brindada me permite un desarrollo continuado, creativo e ilusionante. Mucho por aprender, y todo por hacer…

Y hacia estos caminos gastronómicos me derivé, y por ellos transito, una oportunidad para crecer y unida al mundo del chocolate, las ventas y la comunicación. Siempre en evolución y retomando las ganas de escribir en éste medio que tengo cuasi abandonado (y escribir en otros medios de nuevo ¿Por qué no?)

Entiendo que por mi dejadez en este Blog, el número de lectores será irrisorio en este momento, quizá este ejercicio de situación profesional que hago en este artículo ni siquiera sea interesante pero me he propuesto recuperar el feeling con mi expresión escrita, que tantas alegrías me ha dado otrora…

Muchas gracias por leerme.

Sigo siendo @SantiGonFe para lo que gusten.

y también @Gastrocomercial en twitter (al servicio de Da Silva, eso sí)

e @instabirra en twitter e @instabirras en instagram, por si a alguien de ustedes les gusta la buena cerveza, que algún frikismo tiene que aparecer en rrss, que no todo va a ser trabajo.